Después de un concurso en el que participaron 247 colegios público y privados, la Universidad Nacional eligió a cuatro alumnos que viajarán a Brasil a representar al país.

De los 5.355 estudiantes de los 247 colegios públicos y privados del país que participaron en la XXVII Olimpiada Colombiana de Química, organizada por la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), se seleccionaron 4 de undécimo grado para representar al país en la XXV Olimpiada Iberoamericana, que tendrá lugar en Brasil en 2020.

Los ganadores de la medalla de oro en Bogotá fueron los estudiantes María José Charria Macías, del Gimnasio Vermont, y Santiago José Mongua Niño, del Liceo de Cervantes El Retiro. En Barranquilla, el ganador fue Samuel David Rodríguez Romero, del Colegio Montessori, y de Duitama, Andrés Nicolás Ramírez Barrera, del Colegio Seminario Diocesano.  

El evento, que se ha realizado en dos ocasiones en el campus de la UNAL –1998 y 2016–, es una herramienta para profundizar en temas como estados de la materia, estructura atómica y molecular, estequiometria, disoluciones, equilibrio y termodinámica, cinética, química orgánica y bioquímica, entre otras, permitiendo el encuentro de alumnos de todo el país que han aprendido esta disciplina con distintos profesores y estilos o estrategias didácticas.  

“Muchos profesores de química de los grados noveno, décimo y undécimo proponen dentro de su proyecto de trabajo anual la participación de sus estudiantes en las pruebas de la Olimpiada Colombiana de Química que organiza la UNAL, la cual ha propiciado el aumento del número de jóvenes participantes”, señala la profesora Liliana Giraldo Gutiérrez, directora de la Olimpiada de Química de la UNAL.  

La Olimpiada se inició en 1992 por iniciativa de los profesores José Muñoz y Dagoberto Cáceres, del Departamento de Química de la UNAL Sede Bogotá, quienes para ese entonces colaboraban con la Olimpiada Venezolana de Química.  

El objetivo fue establecer una estrecha relación entre la Universidad y los colegios para fomentar así el interés por la química, encausando las capacidades investigativas de alumnos, docentes y amantes de esta ciencia básica.  

Al respecto, la profesora Giraldo recuerda que en la primera Olimpiada participaron alrededor de 300 estudiantes, número que ha aumentado progresivamente y que durante los 27 años de organización del evento gira alrededor de 95.000 jóvenes participantes.  

“La Olimpiada Colombiana de Química ha mantenido su objetivo de hacer que los jóvenes se interesen por los aspectos relacionados con la disciplina desde diferentes campos como las campañas ambientales, el mejoramiento de los productos de uso cotidiano y los procesos químicos implicados en las transformaciones de la materia”, señala la directora.  

La prueba eliminatoria constó de preguntas de selección múltiple sobre temas básicos de química. En la siguiente fase del concurso participaron los seleccionados de la prueba eliminatoria, quienes luego, en la prueba final, se enfrentaron a preguntas tanto abiertas como de selección múltiple, en las que se incluyeron temas de la Olimpiada Iberoamericana, para preparar a los próximos representantes y competir contra 18 países más. Además de los cuatro estudiantes ganadores, la selección estará integrada por dos profesores de la UNAL que aún no han sido elegidos.  

“El concurso mide la apropiación del conocimiento en química y puede hacer que los jóvenes tomen conciencia de la riqueza de las implicaciones e impactos que tiene dicha disciplina en la vida cotidiana. El aporte de las ciencias de la naturaleza debería facilitar la aproximación de los estudiantes a la realidad natural y contribuir a su mejor integración en el medio social”, destaca la profesora Giraldo, quien puntualiza que Colombia ha asistido sin interrupción a las 24 versiones de la Olimpiada Iberoamericana y espera que la selección escogida tenga una buena representación en 2020.  

Fuente: elespectador.com