La presencia de estas especies se ha incrementado en Antioquia debido al invierno.
La temporada de lluvias no trae solo incidentes por inundaciones y posibles enfermedades respiratorias. De acuerdo con la Secretaría de Salud de Antioquia, también viene acompañada de un aumento en la presencia de animales venenosos y ponzoñosos, como serpientes, alacranes, arañas, abejas, avispas, orugas, entre otros.
Según los reportes más recientes entregados por el Sistema de Vigilancia en Salud Pública, en 2016 ocurrieron 778 accidentes causados por serpientes, que dejaron seis personas fallecidas, una de ellas una niña, en los municipios antioqueños de Amalfi, Necoclí, Remedios, San Luis y Valdivia.
Asimismo, Alberto Aristizábal, director de Factores de Riesgo de la Secretaría, indicó que cada año se presentan entre 150 y 200 accidentes con alacranes. El funcionario también expresó que las personas más afectadas usualmente son los menores de edad y las mujeres. En el transcurso de 2017, han fallecido dos niños por esta causa en los municipios de Caucasia y Dabeiba.
Por ello, alertaron a las administraciones locales y a los ciudadanos a estar alertas, especialmente en este segundo periodo de temporada de lluvias del año. Las regiones más afectadas por estas razones son en su orden Urabá, Nordeste, Bajo Cauca, Suroeste, Oriente y Norte.
Aristizábal explicó que estos accidentes son un problema de alto impacto en salud pública y que todas las instituciones deben atender y tratar de forma oportuna a los pacientes que sufran accidentes con estas especies.
Entre tanto, les recomendó a las entidades territoriales que verifiquen la existencia de sueros para el manejo del envenenamiento, en las instituciones de salud de su área de influencia. Además, a las personas se les recomienda acudir con rapidez a un centro hospitalario.
El funcionario recordó que el agua no es el hábitat natural de los animales ponzoñosos y venenosos, por lo cual, durante las inundaciones provocadas por las lluvias, buscan lugares secos que los acercan a los seres humanos.
Fuente/E l Tiempo