Las bondades territoriales de Risaralda permiten la generación de emprendimientos con características de negocio verde con miras a crear nuevas alternativas económicas, innovadoras y sostenibles en el departamento.

Los negocios verdes se caracterizan por el desarrollo de actividades económicas de diversa índole, en las que se ofertan bienes y servicios con énfasis en el cuidado del medio ambiente y su impacto ambiental positivo, además de incorporan buenas prácticas ambientales, sociales, económicas, con enfoque de ciclo de vida, contribuyendo a la conservación del ambiente como capital natural que soporta el desarrollo del territorio.  

Es por esa razón que, en lo corrido del año, el enfoque de fortalecimiento empresarial del programa Administración de Empresas ha centrado en la estrategia Ruta 2.0 de Emprendimientos Verdes e Inclusivos, un trabajo realizado de manera articulada con la Corporación Autónoma Regional de Risaralda Carder.

“ Desde la Institución estamos acompañando 12 emprendimientos de Risaralda a través de 52 estudiantes que cursan de quinto a octavo semestre del programa de Administración de Empresas y quienes cumplen las funciones de consultores empresariales. A través de esta actividad, promovemos la puesta en práctica de sus conocimientos y habilidades desde una perspectiva de impacto social que permita el fortalecimiento al tejido empresarial de la región. A partir de este acompañamiento, pretendemos generar transferencia de conocimiento y generación de capacidades que faculten a estos emprendimientos alcanzar en el corto o mediano plazo su reconocimiento como negocios verdes ”, comenta Ana María Díez, directora del programa de Administración de Empresas de Areandina seccional Pereira.   

De esta manera, varios emprendimientos de Balboa, La Celia, Apia, Santuario y Santa Rosa de Cabal, han ingresado a una primera fase en la que a través del levantamiento de información y la caracterización del negocio, se buscan oportunidades de mejoras para fortalecer sus estrategias de marketing, manejo administrativo, finanzas o desarrollo organizacional, entendiendo que estas son fundamentales para establecer una plataforma estratégica sólida con miras a la sostenibilidad, el crecimiento y la permanencia en el mercado.   

Con el diagnóstico y el plan de mejora establecido próximamente por ambas instituciones, se están impactando los sectores del ecoturismo, agroturismo, aprovechamiento de residuos para la elaboración de artesanías, la producción agroecológica de productos como cacao, panela y mermeladas, todos con gran potencial como dinamizadores de la economía en la región.   

“ Este ejercicio tiene grandes beneficios en todas las vías: no solo acerca a la academia al ejercicio real del ámbito empresarial, sino que les permite también a los empresarios de la región encontrar consultorías de alta calidad y con un buen nivel técnico para el fortalecimiento de los negocios ”, explica la directora Díez.   

De acuerdo con la Corporación Autónoma Regional de Risaralda, la importancia de consolidarse como un Negocio Verde radica en que estos, aseguran los beneficios directos derivados de los negocios verdes al productor, consumidor y a la sociedad, permiten apreciar relaciones vitales del bien o servicio con aspectos como la biodiversidad, productividad, protección de los recursos renovables y no renovables y son factores de decisión de compra del consumidor.   

Así mismo, la Carder ha venido socializando en este proceso los criterios de verificación para alcanzar el sello de acuerdo con el Plan Nacional de Negocios Verdes del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible: 
• Viabilidad económica del negocio.
• Impacto ambiental positivo del bien o servicio.
• Enfoque de ciclo de vida del bien o servicio.
• Vida útil.
• No uso de sustancias o materiales peligrosos.
• Reciclabilidad de los materiales y/o uso de materiales reciclados.
• Uso eficiente y sostenible de recursos para la producción del bien o servicio.
• Responsabilidad social al interior de la empresa.
• Responsabilidad social y ambiental en la cadena de valor de la empresa.
• Responsabilidad social y ambiental al exterior de la empresa.
• Comunicación de atributos sociales o ambientales asociados al bien o servicio.
• Esquemas, programas o reconocimientos ambientales o sociales implementados o recibidos.

Fuente: Comunicaciones   Areandina Pereira